El color negro y lo que simboliza
Página 59:B "andaba por la calle con zapatos negros"
La guemará en nuestra suguiá nos relata que Eliezer Zeirá -el pequeño-, ataba sus zapatos con cordones negros como signo de luto por la destrucción del templo. Jajamím que vieron que ésta no era la costumbre de la mayoría de pueblo que normalmente usan cordones blancos, sospecharon que lo que hacía Eliezer Zeirá era por orgullo y le retaron. Cuando descubrieron que él era un talmid jajam, le dejaron tranquilo, sabiendo que su duelo era un duelo auténtico.
Como es sabido, jajamím determinaron varios decretos que sirven como recordatorios por la destrucción del Bet haMikdash. La guemará (BB, 60:B) incluso nos dice, que tras la destrucción del Templo hubo entre los jajamím aquellos que quisieron prohibir el comer carne y beber vino, pero jajamím se opusieron, estimando que éste decreto sería impracticable para el público.
Pintar de negro una amá sobre una amá: Uno de los dos decretos que fue constituido para guardar la memoria de la destrucción del Templo de generación en generación, fue el dejar un espacio -de una amá sobre una amá- no pintado en la entrada de la casa (así lo decretó el Shuljan Aruj, O”J, 560:1). Pero hay opiniones que divergieron, diciendo que es suficiente de pintar esta superficie en color negro. Según muchos de los poskim (Levush, Shelá, Magen Avraham y el Peri Megadim) dejar esta superficie sin pintar es la forma apropiada de memorizar la destrucción del Templo. En cambio, el Eliyá Rabá cita las palabras del autor de Aguda, que también pintar la misma superficie de color negro, es suficiente para memorizar este acontecimiento. Rabí Moshé Feinshtein (Shut Igerot Moshé, O”J, tercera parte-86) escribe que, ya que muchos jasidím y anshé maasé acostumbraron a pintarlo de negro, es seguro que debemos encontrarles una justificación.
Y para esto, Rabí Moshé se apoya en la costumbre de Eliezer Zeirá, que vestía prendas negras como signo de duelo por la destrucción del Templo. Probablemente, estos trajes no eran trajes feos e inapropiados, ya que un talmid jajám ha de vestirse apropiadamente, de aquí vemos que un "signo de duelo" no quiere decir algo feo sino únicamente un signo y señal que indica el duelo. Según esto se comprende la opinión de los poskim que dicen que es suficiente pintar de negro una amá sobre una amá para indicar el duelo.
Es interesante mencionar la pregunta del Admor de Tsants zts”l, por qué jajamím retaron a Eliezer “el pequeño”, echándole en cara una aparente arrogancia, y cesaron de molestarle únicamente cuando se enteraron que era un talmid jajám. ¿Qué quiere decir esto? ¿Que un am haarets no está permitido estar en duelo por la destrucción?
La verdadera pena es por la destrucción del Templo: El Shut Divré Yatsiv (O”J 238) cita, que lo principal en el duelo por la destrucción no es que estamos sentados tranquilos en nuestras propiedades, sino el Bitul Torá, y como dice la guemará (Jagiga 5:B) que el exilio de los judíos de su lugar constituye el mayor Bitul Torá posible.
Consecuentemente, únicamente quien está ocupado día y noche con el estudio de la Torá, posiblemente esté en un duelo auténtico y profundo por la destrucción, ya que él sí reconoce la gran pérdida espiritual causada día tras día al pueblo de Israel por la destrucción del Templo. Pero si no, su duelo será un duelo y una tristeza por pérdidas materiales únicamente.