Cocinero negligente en su labor

Página 5:a - “daño no visible”.
En nuestra suguiá los emoraim discreparon sobre el caso de una persona que provocó un daño no visible, acerca de si debe pagar o no.
Este término de hezek sheenó nikar (daño no perceptible) lo explica el Meiri (Guitín 40:b), quien nos dice que se presenta cuando el objeto mismo no fue dañado, sino que la persona provocó que el objeto quede en un estado que la halajá prohíbe su uso. Por ejemplo, una persona que impurificó la terumá de su compañero, si bien no dañó la fruta en sí, la ha dejado inservible. Fue dictaminado (Shuljan Aruj Joshen Mishpat, 385:1) que desde el punto de vista legal esta persona no tiene que pagarle nada a su compañero, debido a que el daño que le infringió no es perceptible. No obstante, jajamím lo multaron, por lo que debe pagar la totalidad del daño, si es que se lo hizo deliberadamente.
Esto será así mientras no haya habido ningún cambio en el objeto mismo. Pero si alguien hace un minúsculo orificio en el etrog de su compañero, por ejemplo, deberá pagarle el daño, ya que el etrog dejará de servir para cumplir la mitsvá de arbaá miním, incluso que el orificio tampoco se vea a simple vista. La razón es que en realidad hubo un cambio en el propio etrog. Podemos aprender una las repercusiones de esta halajá, a partir de una sutil diferencia que escribe el autor del Perí Megadim:
Ese episodio ocurrió con un cocinero que por error introdujo carne terefá dentro de dos cacerolas. Una contenía un preparado de berenjenas, mientras que la otra un guiso de carne kasher. De lo dicho por el Perí Megadim (Or HaJayim, hanhagat Oraraj Jayim, segunda sección) sale que si examinamos cada caso por separado, llegaremos a la conclusión de que el carnicero deberá pagar por el guiso de las berenjenas que ahora quedó prohibido comer. No obstante, no tendrá ningún deber de pagar por la carne kasher que echó a perder. La razón es que en el guiso de carne que fue mezclado con la carne taref no hubo ningún cambio y su gusto quedó igual. Ya que el gusto de ambos tipos de carne es similar… por lo tanto, esto se considera un hezek sheenó nikar. Y quien provoca este tipo de daño si ninguna intención, está exento incluso de la multa decretada por jajamím.
En cambio, el guiso de berenjenas cambió de gusto y absorbió el sabor de la carne taref. Por lo tanto, siendo que el preparado de berenjenas fue afectado, el caso es considerado un hezek nikar, un daño perceptible. Y, en consecuencia, el hombre es responsable en cualquier caso. Pues adam muad leolam y debe pagar todo el daño (ver Shut Minjat Shelomó, primera parte, 38).